Hoy celebramos el Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo y dado que este año (Ley 31/95 con entrada en vigor el 11 de febrero de 1996) creemos que es un buen momento para pararnos a reflexionar. José Manuel Alocén, Director de la línea de negocio de Prevención de Riesgos Laborales en Applus+, era la persona indicada que podía hacer un balance de estas dos décadas, por su experiencia, conocimientos y larga carrera en el sector:
“Hasta la aparición de la Ley 31/95, en España convivíamos con la Ordenanza de seguridad e Higiene en el trabajo del año 1971, aunque, a comienzos de los años 80, se empieza a hablar en España de una “Ley básica de Seguridad y Salud en el Trabajo “.
Tras la entrada de España en la CEE en 1986 y la necesidad de adaptación de nuestra normativa al marco comunitario, se produce la trasposición de la Directiva Europea 89/391/CEE , aprobándose el 8 de noviembre de 1995 la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales ( LPRL ).
Para algunos 20 años no supondrán nada, pero si pensamos que en España, por ejemplo, la duración media de un matrimonio es de 15 años, podremos aventurar que es un período de tiempo más que razonable, con sus sinsabores, que los ha habido, pero también con la satisfacción de comprobar el cambio de mentalidad en el empresariado español, pasando de hablar del gasto en la prevención a la inversión de la misma y corroborando día a día que son más los trabajadores que anteponen su seguridad a la realización de un trabajo mal ejecutado o en condiciones inasumibles para el buen desempeño de sus tareas.
Se han producido grandes cambios: la población ocupada ha variado, se han modificado las condiciones laborales, el sector de la construcción ha sufrido un retroceso inimaginable(habitualmente uno de las más ligados a la accidentalidad) y han aparecido nuevos riesgos asociados a las nuevas formas de organizar el trabajo y las nuevas tecnologías.
Aunque hemos mejorado mucho en nuestro país en cuanto a la accidentalidad mortal pasando de tener más de 1000 accidentes mortales en el año 1995 a menos de la mitad en los últimos años, no es menos cierto que de media al menos fallece una persona cada día por accidente de trabajo en España. Vidas segadas inútil e irracionalmente, porque seguro que con la aplicación de las adecuadas medidas de prevención y la actuación profesional del trabajador se hubieran evitado la casi totalidad de dichos accidentes.
En Applus+, desde la aparición de la Ley 31/95 entendimos que debíamos prestar ese servicio a nuestros clientes, en ocasiones a demanda suya, a veces por complementar nuestros trabajos ya realizados de consultoría de medio ambiente o calidad y otras veces por nuestra detección de necesidades por el nuevo ámbito de aplicación legal .
Comenzamos en dicha actividad 2 personas y hoy es una satisfacción saber que somos más de 300 los profesionales que exclusivamente trabajamos para la línea de negocio de PRL.
En estos 20 años, en algún momento, han formado parte de nuestra plantilla y se han formado más de 1000 profesionales y hoy podemos presumir que muchos excompañeros nuestros ocupan puestos de responsabilidad en el sector, en empresas de gran relevancia como GNF, Iberinco, Siemens o Air liquide, por citar algunas, y que los que en su momento fueron nuestros colegas hoy son nuestros clientes.
No cabe duda que aún hay mucho camino por recorrer. Entre las propuestas que se nos ocurren:
- Fomentar desde la escuela infantil la formación en prevención de riesgos laborales, para que nuestras generaciones futuras tengan interiorizados totalmente los conceptos y la forma de actuar seguros en el trabajo.
- Avanzar en el estudio de riesgos emergentes (como la exposición a nano sustancias, por citar un ejemplo) y no tan modernos (como los trastornos músculo esqueléticos o riesgos psicosociales).
- Desarrollar los Planes de Acción de la nueva Estrategia de Seguridad y Salud en el Trabajo 2015-2020, para avanzar en la eliminación de la siniestralidad.
- Aumentar la inversión en I+D+I en el sector de la prevención y valorar como las nuevas tecnologías (por ejemplo el uso de drones) pueden servirnos para desarrollar nuestra actividad.
Para finalizar nos gustaría acabar con unas frases escritas por Miguel de Cervantes ( 20x20 aniversario de su fallecimiento este 23 de abril ) casi al comienzo del Quijote :“En efecto, rematado ya su juicio, vino a dar en el más extraño pensamiento que jamás dio loco en el mundo, y fue que le pareció convenible y necesario, así para el aumento de su honra, como para el servicio de su república, hacerse caballero andante, e irse por todo el mundo con sus armas y caballo a buscar las aventuras, y a ejercitarse en todo aquello que él había leído, que los caballeros andantes se ejercitaban, deshaciendo todo género de agravio, y poniéndose en ocasiones y peligros, donde acabándolos, cobrase eterno nombre y fama.”
Que los técnicos de prevención seamos hoy más que nunca caballeros andantes y vayamos por nuestros clientes deshaciendo todo género de peligros.”